Todo el mundo tiene varios pares de zapatos, pero no siempre se guardan en un mueble específico como puede ser un zapatero. Guardarlos en esta clase de mueble es una ventaja, sobre todo porque siempre tendremos el calzado completamente ordenado y listo para ser utilizado en cualquier momento. Para ello, se pueden utilizar muchos accesorios para calzado, lo que hará mucho más fácil su almacenamiento y su cuidado.
¿Qué accesorios podemos incorporar en nuestro zapatero?
Si el zapatero es de estantes, contar con un organizador de zapatos ajustables de plástico, se puede decir que es una de las mejores opciones de almacenamiento. Con ello se ahorra reducir hasta el 50% de espacio en los estantes, permitiendo tener los pares de zapatos juntos, totalmente ordenados y sin que se lleguen a estropear.
En caso de que el zapatero esté colocado bajo una escalera o en una zona donde no le llegue correctamente la luz, nunca está de más instalar una lámpara LED adhesiva o que podemos fijar mediante diferentes técnicas. Funcionan con batería, son muy asequibles y nos permitirá ver todos los zapatos con total claridad.
En caso de que el lugar que quieras utilizar como zapatero no tenga estantes y no sea demasiado grande, siempre se puede colocar una barra, como la de los armarios para colgar camisas, chaquetas, etc. A ello hay que sumarle los organizadores de plástico especialmente diseñados para el calzado. Se cuelgan fácilmente de la barra y se puede regular la longitud, para que se adapten a la perfección. Además, se pueden almacenar los zapatos por cada lado, lo que multiplica las posibilidades de almacenamiento en un espacio pequeño.
Otra alternativa muy interesante si el zapatero es muy pequeño, es lo que se conoce como rueda de almacenamiento para calzado. Se parece mucho a las típicas ruedas para que corran los hámsters pero con un espacio y soportes específicos lo suficientemente amplios como para guardar hasta 14 pares en un mínimo espacio.